En un emocionante encuentro, Estados Unidos se impuso por 1-0 a Brasil en la final de la Copa Oro de la Concacaf, el torneo más importante de la región. El equipo americano, que ostenta el récord de títulos mundiales, demostró su eficacia y solvencia ante las campeonas de la Conmebol, que dominaron gran parte del juego pero no pudieron concretar sus oportunidades. El único gol del partido llegó en el segundo tiempo, cuando una excelente jugada colectiva terminó con un centro preciso al área, donde una delantera estadounidense cabeceó al fondo de la red. Brasil intentó reaccionar, pero se encontró con una defensa sólida y una portera inspirada. Así, Estados Unidos se coronó campeón de la Copa Oro por primera vez en su historia, mientras que Brasil se quedó con el subcampeonato y el reconocimiento de su juego vistoso y ofensivo.